En la mañana de hoy, malvadas tropas prusianas han tomado el control de los estudios de Final Boss. En un acto claro de traición a éste nuestro territorio y en una muestra de desprecio hacia nuestra corona y nuestro sistema político, los soldados comandados por el despiadado Gebhard Leberecht von Blucher han encañonado a nuestros valerosos miembros del equipo para que detengan toda producción del juego "El color que cayó del cielo".
El equipo de Final Boss, oponiéndose heroicamente a la ocupación enemiga.
El comandante en jefe Von Blucher, en un repulsivo discurso cargado de odio, declaró que "tal afrenta no significa más que un descarado insulto hacia una nación arraigada en Europa desde hace siglos." Acto seguido, ejecutó con su propia espada a nuestro encargado de Comunicación, acusándole de difundir falsa propaganda contra su nación.
El maléfico, Gebhard Leberecht von Blucher, comandante de las tropas del infierno.
A continuación, ordenó abrir fuego sobre el resto del equipo, acabando impunemente con la flor y nata artística de nuestra patria. Un elenco de los más creativos y talentosos artistas y creadores de disciplinas tan variadas como la ilustración, el diseño, la animación o la programación.
Pero de entre los cadáveres, y sorteando a las guardias prusianas, un malerido encargado de Mecánicas, pudo arrastrarse hasta ésta imprenta y contar de su puño y letra todo el relato, antes de morir entre esputos de sangre y plomo.
Hoy nuestro país llora el trágico, pero heroico final de estos hombres y mujeres bendecidos por Dios, que dieron su vida para que nuestros patriotas pudiesen jugar una vez más a una aventura gráfica Lovecraftniana.
En su nombre, llamamos a todos los hombres y jóvenes con edad de empuñar un fusil para expulsar de nuestras tierras a esos malvados prusianos que sólo nos han traído la muerte y la vergüenza. Aquí puedes apuntarte en las listas de reclutamiento que el estado ha habilitado para comenzar a formar la milicias y coordinar la lucha.
¡¡LARGA VIDA A NUESTRO HÉROES DE FINAL BOSS!!